LA IMAGEN FOTOGRAFICA
La palabra fotografía procede del griego, y etimológicamente quiere
decir “escribir con luz”. Esto se ve reflejado en dos aspectos:
- Por un lado necesitaremos saber qué vamos a captar. Determinada fuente de luz ilumina la
escena y lo que se capta es la
luz reflejada por esa escena (también puede darse el caso de que la
fuente de luz esté incluida en la
escena, como podría ocurrir si se fotografiase un paisaje
incluyendo el sol o una calle de noche incluyendo una farola).
- Por otra parte, necesitamos saber dónde lo vamos a fijar: necesitaríamos determinado material para registrar la información de
la luz que queremos captar, y ese material podrá ser fotoquímico (película) o
electrónico (sensor).
La fotografía no puede aparecer hasta mediados del s. XIX, después de la
revolución industrial, en un momento en el que las aportaciones de la física (óptica), química y mecánica están
suficientemente maduras.
Desde siglos antes se conocían mecanismos ópticos para ayudar al dibujo.
En el Renacimiento se hizo frecuente el empleo de la cámara oscura, en la que
si se coloca un objeto convenientemente iluminado delante de una caja opaca en
la que se practica un agujero en la cara frontal, en la cara posterior se
obtiene la proyección invertida del objeto en cuestión. Si observamos este
gráfico y repasamos lo que sabemos sobre teoría de la luz y su propagación,
entendemos por qué necesariamente se
forma invertida la imagen.
CONCLUSION
LA IMAGEN FOTOGRÁFICA TIENE UN PARECIDO A LA RADIOGRAFÍA SOLO QUE ESTA NECESITA UN CAMPO DE LUZ PARA PODER TRADUCIR SU IMAGEN.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario